Adolescentes, selfies y piojos

Quizá no le estamos dando la importancia que merece, pero esta moda fervorosa de los selfies conjuntos entre los y las adolescentes es ya considerada por algunas organizaciones como el Instituto Nacional de Salud Pública y Medio Ambiente holandés como una de las causas principales de proliferación de los piojos entre este joven sector de la población.

Si a esta moda le sumamos la de las largas y lisas melenas que llenan sus feeds de Instagram, y que todas las chicas quieren lucir, el caldo de cultivo para estos indeseables parásitos está servido, ya que no hay nada más apetecible para un piojo que una amplia superficie de pelo por donde pasearse, y si está en continuo contacto con otras superficies similares, pues los piojillos podrán campar a sus anchas por todo el Instituto.

Tratemos el tema piojos con tacto

Visto lo visto las madres y padres ya no sólo tenemos que poner el ojo en los más pequeños y revisar si tienen síntomas de piojos a menudo, sino que también debemos preocuparnos si tenemos adolescentes en casa porque también son foco de contagio. Pero claro, la forma de abordar el tema con ellos tiene que ser diferente porque ya son personas autónomas y capaces de participar en las decisiones que a ellos conciernen, así que tendremos que facilitarles información sobre prevención o posibles tratamientos si ya están infectados, como Neositrín spray gel que, además de ser súper fácil de aplicar con el spray, actúa en un minuto, no contiene insecticidas, y se elimina fácilmente con el champú Neositrín.

Pero puede que sientan miedo a contar lo que les pasa quizá por si tomamos la decisión de cortarles el pelo, por eso lo mejor es observarlos y si notamos que se rascan con frecuencia, podemos dejarles claro que, si bien un corte de pelo es algo que facilitaría la desparasitación, no es absolutamente necesario, y que en todo caso sería una decisión que tendrían que tomar ellos en última instancia.

De todos modos, hemos de tener en cuenta que se trata de un tema delicado, con el que se pueden sentir incómodos por asociar los piojos a falta de higiene, o incluso avergonzados por pensar que se pueden llegar a sentir señalados por sus compañeros de clase. Por eso es muy importante facilitarles información acerca de posibles formas de contagio, y dejarles claro que nada tiene que ver con la falta de higiene, que es cuestión de mala suerte si los han cogido, y que con el tratamiento adecuado y una buena prevención podemos resolver el problema pueden quedar limpios, ofreciéndonos a ayudar en lo que necesiten.

Hábitos para prevenir el contagio de piojos

Pero es mejor no llegar a eso, ¿Verdad? Para ello debemos establecer una rutina de hábitos que reducirán considerablemente la probabilidad de contagio, como es usar cada mañana antes de ir al Instituto el Neositrin Protect a modo de acondicionador sin aclarado, que además de evitar el contagio, sirve para desenredar y dejar un aroma super cool a naranja y mango. Otro consejo de prevención sería pasar la lendrera una vez por semana tras el lavado del cabello, y con el pelo impregnado de acondicionador o de su mascarilla favorita que, no sólo les aportará nutrición y brillo a ese pelazo, sino que hará más fácil la labor de pasar la lendrera, y se eliminará cualquier elemento parasitario que se hubiere podido instalar evitando su proliferación.

Precauciones para evitar coger piojos

Los adolescentes son muy dados a los selfies conjuntos, a compartir cepillos del pelo, gafas de sol, toallas… Además se suelen prestar sus auriculares, incluso los comparten mientras ven “Tik Toks” o videos de Youtube.

Por eso os propongo que hagamos que lleguen ellos a sus propias conclusiones tras darles toda la información, y seguro que se les ocurren otras formas de hacerse fotos en las que no sea necesario juntar las cabezas; Podríamos llamarlos selfies creativos, en los que uno de ellos se adelanta un poco al grupo antes de disparar, mientras los demás se colocan en distintos planos de manera que queden encajados en la foto, unos más adelantadas que otros, pero sin que las cabelleras se rocen.

Éste sería sólo un ejemplo, porque nuestros chicos y chicas son muy artísticos, y seguro que se les ocurren mil formas más de ser originales al fotografiarse, y que no conlleven riesgo de contagio.